¡TU TIENES EL PODER!
By: Silvia Zuniga C | [email protected]
¡Muchas veces nos sentimos perdidos y no sabemos cómo volver a la dirección correcta, pero ahora es el momento, es el tiempo de decidir que somos dueños de nuestras emociones y nuestras actitudes así que de hoy en adelante diremos cada día yo tengo el poder para cambiar! Todos tenemos el poder de cambiar nuestras vidas, y el cambio es posible a través de la determinación, el esfuerzo y la búsqueda de crecimiento personal y espiritual.
Cambios para poder lograr mejor tu estilo de vida:
- Lograr tus metas a corto y largo plazo
- Aprender de tus errores
- Rodearte de gente positiva
- Celebrar tus logros
- Aprender nuevos y buenos hábitos
- Dejar los hábitos que lastiman el cuerpo interior y exterior.
A cada uno de nosotros se le ha dado el poder para cambiar nuestra vida. Como parte del gran plan de felicidad del Señor, contamos con el albedrío personal para tomar decisiones, por lo que podemos decidir ser mejores y hacer mejor las cosas. Todos tenemos que cambiar en algo; es decir, algunos de nosotros tenemos que ser más amables en casa, menos egoístas, escuchar mejor y ser más considerados en el modo como tratamos a los demás. Algunos tenemos hábitos que precisamos cambiar, hábitos que nos dañan a nosotros mismos y a los que nos rodean. En ocasiones, quizá necesitemos una sacudida que nos impulse a cambiar. En la biblia en el libro de Hechos capítulo 9 ay un hombre llamado Saulo (Pedro) que queda siego por matar a los cristianos, y hasta que tiene un encuentro personal con Dios el cambia y obtiene el milagro de recuperar su vista, ¡maravilloso! Espero ninguno de nosotros pasemos por eso para empezar hacer cambios en nuestras vidas. Necesitamos dejar de hacer lo que nos lastima y comenzar a hacer cambios positivos.
Otro tipo de cambio del que me gustaría hablar es el de recuperarse de los hábitos esclavizantes, que incluyen los males relacionados con el acceso de alcohol, las drogas, el tabaco etc. El uso incorrecto de las drogas arruina familias, cuesta miles de millones de dólares por la pérdida de productividad, estira al máximo el sistema del cuidado de la salud, y da fin a vidas”4. Es una maldición para la sociedad.
Hay muchos tipos de adicciones, y es difícil cambiar para alguien que sufre de una adicción seria, pues algunas alteran la mente. Un artículo reciente sobre la adicción decía: “En el cerebro de los adictos, hay menos actividad en la corteza frontal, donde el pensamiento racional puede controlar el comportamiento impulsivo”5 debemos abstenernos de cualquier cosa que no nos permita cumplir con los propósitos que Dios tiene para con nosotros y que ponga en peligro las bendiciones de la eternidad. Estamos en esta vida para que el espíritu logre controlar al cuerpo, y no al revés.
¡Cualquier tipo de adicción impone un terrible precio de dolor y sufrimiento, e incluso puede afectarnos espiritual y físicamente, Sin embargo, hay esperanza, Todos podemos cambiar, y si ponemos todo en manos de Dios si se puede!
Comenzamos por tomar la decisión de cambiar. El admitir que necesitamos ayuda, nos abre puertas a la esperanza, tengamos valor y humildad, y poco a poco con mucho esfuerzo y siendo positivo veremos días bonitos, ¡Nunca te rindas si se puede…! Siempre sonríe.