Oreja de nadador
Escrito por: Marcos Otero, Médico Asociado Jubilado
La primavera ya está aquí, y todo el mundo disfruta de la playa o la piscina. La diversión puede volverse dolorosa rápidamente debido a la oreja de un nadador. El canal auditivo puede atrapar el exceso de humedad en el canal auditivo. La piel del interior se empapa, diluyendo la acidez que suele prevenir la infección. Un corte en el revestimiento del canal auditivo también puede permitir que las bacterias penetren en la piel. Cuando esto sucede, las bacterias y los hongos del agua contaminada o de los objetos colocados en el oído pueden crecer y causar una afección llamada oído de nadador (otitis externa aguda).
Síntomas:
Reconocer los síntomas del oído de un nadador a tiempo es crucial. Por lo general, aparecen a los pocos días de la exposición al agua contaminada y pueden incluir dolor intenso al mover el oído externo, dolor o molestias en o alrededor del oído y pérdida de la audición. Por lo general, solo se ve afectado un oído. Picazón en el oído externo. Hinchazón en el oído o en los ganglios linfáticos del cuello. La sensación de llenura o congestión en el oído. Si nota alguno de estos, es importante tomar medidas y buscar consejo médico.
Muy frecuentes:
Es importante recordar que el oído de nadador es un problema común, especialmente entre los niños y los adultos jóvenes. Si una afección de la piel, como el eccema, hace que te rasques las orejas en exceso, es posible que tengas un mayor riesgo de infección. La acumulación de cerumen también puede aumentar el riesgo al atrapar agua en el oído y aumentar la probabilidad de que te cortes la piel mientras te limpias. No estás solo en esto, y hay medidas que puedes tomar para prevenirlo.
Pide una cita con el médico si tienes dolor, hinchazón o secreción del oído. La otitis de nadador no suele ser grave, pero pueden producirse complicaciones si no se trata. Las complicaciones pueden incluir pérdida de la audición e infecciones recurrentes del oído externo (otitis externa crónica).
Tratamiento:
Es importante recordar que el oído de un nadador es tratable. El tratamiento tiene como objetivo eliminar la infección. Esto puede incluir limpieza, gotas para los oídos y/o medicamentos orales. Con el tratamiento y los cuidados adecuados, se puede superar el oído de nadador.
Prevención:
Para evitar la oreja de un nadador:
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