Causas del dolor de pies – Callos y durezas en los pies

Por Marcos Otero, Medico Asociado Jubilado

Los callos y durezas no son lo mismo. Ambos son capas de piel gruesas y endurecidas que el cuerpo crea para protegerse de la fricción, las lesiones o la presión. Se encuentran en los pies, los dedos de los pies, las manos y los dedos de las manos, y son más comunes en las mujeres que en los hombres.

Síntomas de los callos y durezas

La mayoría de los callos y durezas pueden ser indoloros. La fricción repetida causa ambos. Los callos son más profundos, más pequeños que las durezas y se encuentran en los dedos de los pies o entre ellos. Tienen un centro firme con tejido hinchado circundante. Las durezas, ubicadas en los talones, las plantas de los pies, las palmas de las manos y las rodillas, son más prominentes y rara vez duelen.

CAUSAS DE LOS CALLOS Y DÉBILES EN LOS PIES:

• La fricción o la presión repetidas causan ambos.

• Zapatos o calcetines que no calzan bien. Los zapatos ajustados o los tacones altos aprietan el pie de forma prominente, mientras que los zapatos o calcetines sueltos permiten que el pie se deslice y frote contra el zapato.

• No usar calcetines con zapatos o sandalias también puede causar fricción.

Prevención y tratamiento –

El tratamiento de callos y durezas es el mismo.

• Evite las acciones repetitivas que provocan su formación.

• Use agua tibia con jabón y remoje sus manos o pies: esto suaviza la piel engrosada y facilita su eliminación.

• Hidrate sus manos y pies con regularidad.

• Después de suavizar la piel afectada, adelgace la piel engrosada. Use suavemente una piedra pómez o lima de uñas.

• Use almohadillas medicinales o no medicinales para protegerse de una mayor fricción.

• Use zapatos y calcetines acolchados del tamaño correcto.

Los diabéticos o aquellos con circulación periférica o mala circulación deben hablar con su médico antes de comenzar el autotratamiento.

Complicaciones:

• Úlceras en los pies: especialmente observadas en pacientes diabéticos o pacientes con neuropatía o compromiso vascular

• Infección

• Signos de gangrena (cambio de color, frío).

Si desarrolla complicaciones o estas se vuelven excesivamente dolorosas, consulte a su médico.

Recuerde, el buen cuidado de los pies es CLAVE.